Mal de altura: qué es y síntomas

AristaSur 2 Enero 2018
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Mal de altura
Sección Seguridad

El mal de altura (o mal de montaña agudo) es el nombre que recibe la respuesta fisiológica del organismo que se produce a gran altitud. A medida que ascendemos, la presión atmosférica se reduce progresivamente y, con ella, la presión parcial del oxígeno que hay en el aire que inspiramos (en este otro artículo te lo explicamos). La disminución brusca y sostenida de oxígeno en el cuerpo produce una serie de alteraciones que pueden provocar hasta la muerte. Por ello, reconocer su sintomatología es el primer paso para prevenir sus consecuencias.

Aunque varía mucho de un individuo a otro, los primeros síntomas pueden aparecer desde los 2.500-3.000 metros. Se trata de un riesgo que no se limita únicamente a montañeros. En regiones turísticas como Nepal o los Andes, en torno a los 4.000 y 5.000 metros, el peligro del mal de altura acecha a todos los visitantes no aclimatados a la altitud.

Aparte de la variabilidad individual, otros factores que influyen en la aparición del mal de altura son la velocidad de ascenso (cuanto más rápido se realiza la ascensión, más probabilidad de que aparezcan los síntomas por una mala aclimatación a la altura), el tiempo en altura (cuanto más tiempo se pase en altas cotas, más probabilidad de que aparezcan y se compliquen los síntomas) y la actividad física realizada (cuanto más ejercicio se haga en altitud, mayor riesgo de que surja y empeore el mal del altura). En última instancia, la aparición del mal de montaña agudo depende de la aclimatación del organismo ante la baja presión de oxígeno, y todos los factores descritos anteriormente impiden una correcta aclimatación. Es por ello que el mal de altura no depende de la forma física de la persona, pudiendo afectar incluso a los montañeros o atletas más experimentados. 

Primeros síntomas

Afectan a la mitad de individuos por encima de los 3.500 metros y prácticamente a todos los que realizan una ascensión rápida a cotas de 5.000 metros sin una aclimatación previa:

  • Náuseas.
  • Malestar general.
  • Dolor de cabeza que remite con analgésicos.
  • Dificultad para conciliar el sueño y dormir.

Ante la aparición de los primeros síntomas se recomienda descansar unos días antes de continuar la ascensión si nos encontramos en cotas inferiores a los 3.000 metros, con el objetivo de favorecer una correcta aclimatación del organismo a esa altura. Por el contrario, si nos encontramos sobre los 3.500 - 4.000 metros, se recomienda descender unos 500 metros y permanecer unos días ahí para lograr una buena aclimatacion.

Síntomas graves del mal de altura

Ante la aparición de los siguientes síntomas las recomendaciones son buscar ayuda médica y comenzar rápidamente el descenso a la menor altura posible:

  • Confusión y desorientación.
  • Descoordinación motriz.
  • Alteraciones visuales.
  • Mareos, náuseas y/o vómitos.
  • Dolor de cabeza que no remite con analgésicos.
  • Presión en el pecho y dificultad respiratoria.
  • Hinchazón en las zonas de los ojos, manos o tobillos.
  • Cambios psicológicos relacionados con la pérdida del sentido del peligro, habla inconexa y sin sentido, o aturdimiento.

Formas graves del mal de altura

Cuando los síntomas graves persisten un tiempo prolongado pueden estar indicando la presencia de alguna forma grave del mal de altura: edema pulmonar o edema cerebral. En ambos casos, edema se refiere a la hinchazón de algún órgano del cuerpo causada por la acumulación de líquido y los síntomas de cada uno de ellos son:

  • Edema pulmonar: acumulación de líquido en los pulmones que cursa con tos seca, expectoración con sangre, dificultades respiratorias graves, palpitaciones y fatiga extrema.
  • Edema cerebral: acumulación de líquido en el cerebro que cursa con dolor de cabeza, náuseas, vómitos, alteraciones visuales, descoordinación motora, confusión, convulsiones y pérdida de conciencia.

Ambos tipos de edema provocan altas tasas de mortalidad, por lo que es imprescindible descender rápidamente y recibir un tratamiento médico adecuado.